Todo comienza como un cuento de hadas; lo conoces, te enamoras y te sientes como la mujer más afortunada sobre la Tierra. Tienes toda la atención que pueda darte y te llena de detalles, salen a cenar, te envía flores; parece el perfecto Príncipe Azul. ¿Quién se negaría a ser tratada así? Probablemente nadie, incluyéndote a ti.
Quieres creer en el verdadero amor y él se muestra a sí mismo como la persona que has estado esperando toda la vida.
Todo ocurrió demasiado rápido; de hecho él quería dar un paso más en la relación y casi te obligó a hacerlo. Te cegó con todo ese amor y atenciones al punto que jamás dudaste que esa era una apuesta ganadora, que finalmente habías encontrado a alguien con quien pasar el resto de tu vida.
Pero ¿sabes una cosa?, así es como todo comienza. Te seducen y luego te hacen caer en su trampa y una vez que los regalos, los viajes y las cenas quedan atrás, lo único que tienes entre las manos es una sanguijuela narcisista dispuesta a aprovecharse de ti hasta que no quede nada.
Cuando notas los primeros signos de alarma decides ignorarlos. No puedes admitir haber caído ante tantas mentiras absurdas y gestos vacíos; pero lo cierto es que usó todos los medios a su alcance para nublar tu visión.
Pues sí, creíste sus tontas excusas, decidiste creerle porque sonaba tan convincente que sus excusas siempre parecían tener sentido, pero todo se reduce a como comenzaron las cosas. Por algún tiempo te trató como una reina sólo para ganar tu confianza y ahora que sabe que le creerás cualquier cosa que diga, puede dedicarse a jugar contigo su juego macabro de engaño y manipulación.
Esto puede durar muchos años, todo depende de cuan fuerte y determinada seas o de cuanto miedo puedas llegar a tenerle. Todo está condicionado al resultado de tu batalla por no perder tu autoestima y respeto por ti misma.
Vivir en estas condiciones es algo que nadie debería experimentar. Vivir bajo el yugo de hierro de un narcisista puede consumir y destruir a una persona por completo; pero si logras escapar, tendrás una nueva oportunidad de amar a alguien más y recibir a cambio el amor que siempre mereciste.
Debes ser muy cautelosa si piensas que estás saliendo con un narcisista, para saberlo presta atención a los siguientes signos de alarma:
1. Nunca se disculpa
Nunca se disculpa ya que está convencido de que no hizo nada malo. No le importan los sentimientos de los demás; por ejemplo, si llega tarde habiéndote hecho esperar sin ni siquiera haber avisado que estaba retrasado, no será capaz de pedir disculpas porque consideran que es lo más importante del mundo, de manera que si tuviste que esperar por él, no hay problema alguno.
Esto puede pasar en distintos aspectos de la relación; desde cosas triviales como llegar siempre tarde hasta situaciones mucho más delicadas; así que toma en cuenta este signo de alerta y reacciona a tiempo.
2. Está obsesionado con la perfección
Le gusta ser el reflejo del mundo que ve; es decir, un mundo perfecto. Y en el momento que tiene una relación contigo, te ve como el reflejo de sí mismo, así que no te sorprendas si ese narcisista trata de cambiarte de alguna manera; bien sea tu conducta o tu apariencia. Incluso tratará de cambiar la forma en que piensas y la manera que ves el mundo. Tratará de imponer su propia percepción “correcta” de todo.
Procurará que aceptes lo que te impone y que lo aceptes como perfecto. Poco a poco acallará tu voz junto con tu identidad. Te convertirá en lo que quiere que seas y no en la persona con la que tú sueñas ser.
3. Es muy carismáticos
Así es como te conquista. Tienen una personalidad magnética y una energía contagiosa que puede llegar a consumirte. Su energía y vigor llegan a cegarte al punto que terminas viendo sólo las cosas que quiere que veas. Esto siempre pasa al principio.
Pero lo que en realidad quiere es tener toda tu atención y ser el centro de tu vida, algo que no tardará mucho en hacerte ver.
4. Todo se centra en él
Sin importar que rumbo tome la conversación, siempre se las arreglará para que termine siendo sobre él. Sabe exactamente como ponerse en el centro de atención, porque es lo que más le gusta en la vida, ser el centro de todo.
De esta forma busca la aprobación de los demás y de furtivamente fuerza halagos de quien lo rodea; de hecho, sin que te des cuenta, siempre te pondrá en una situación en la que verás obligada a felicitarlo.
5. Tu misión es satisfacerlo
Ese es el único objetivo de su relación y lo único para lo que te quiere; complacer sus deseos y necesidades pero nunca hará lo mismo por ti; por ejemplo, jamás pondrá tus necesidades delante de las suyas; de hecho ni siquiera se dará cuenta de que necesitas algo, porque simplemente no le importas.
El único momento en el que piensas que le importas, al menos un poquito, es cuando demuestra falso interés en algo que te interesa, lo cual hace probablemente porque necesita algo de ti.
6. No cuentas con él para nada
Si te ocurre algo malo o te encuentras en una situación en la que necesitas ayuda, no estará allí para ayudar o socorrerte, de hecho es probable que ni siquiera responda a tu llamado de auxilio ya que seguramente tenga algo mejor que hacer: ocuparse de si mismo.
Si en el fondo de tu corazón sabes que esa persona que tienes a tu lado no vendrá a ayudarte cuando la necesites, o dudas en llamar porque sabes que lo más probable es que la respuesta sea un no; entonces piensa bien sobre esa relación y pregúntate si de verdad tienes algo que vale la pena con esa persona.
7. Es un maestro de la manipulación
Te manipulará al punto de hacerte creer que eres la culpable de todo lo que sale mal. Es imposible que él haga algo mal porque es perfecto, de manera que tú eres la que tiene que mejorar.
Esto tiene mucho que ver con el miedo a ser abandonado. Si te hace creer que eres un desastre, se sentirá más perfecto aún; y siendo así de bueno no lo dejarás. Esa es su lógica e incluso si lo dejas, dirá lo peor de ti para aparecer como tu víctima.
8. No tiene empatía
Cualquier pensamiento o emoción que no esté conectada directamente con él simplemente no le interesa, así que cuando estás triste, llorando o deprimida en tu habitación por la razón que sea, no importa si es algo menor o muy grave, a él no le importará en lo absoluto. Fingirá que le interesa por unos minutos y se acercará para ver de que se trata, pero pronto se aburrirá y se irá ya que no es algo que le afecte o tenga que ver directamente con sus intereses.
9. No acepta las críticas
Eso se debe a que piensa que es perfecto. No acepta las críticas, ni siquiera las constructivas; tampoco los consejos que le ayuden a mejorar. Te atacará cuando se sienta criticado ya que lo toma como una agresión. Si siente eso comenzará a criticarte como venganza, o quizás cambie el argumento y te critique él a ti por problemas viejos y ya olvidados, todo con el único objetivo de desquitarse de la afrenta.
10. Siempre envía señales ambiguas
Hace planes contigo y habla sobre un futuro juntos pero no hace nada para que se concrete; son simples palabras vacías que olvida pronto. Un día te hace sentir especial y al siguiente desaparece, poniéndote de última en su lista de prioridades.
De esta forma te mantiene siempre en una especie de montaña rusa emocional. Al principio quizás puedas lidiar con eso, aunque seguramente no aguantarás mucho tiempo.