A pesar de lo que una mujer quiera creer, el motivo por el cual un hombre no la corteja con suficiente empeño, la verdadera y genuina razón por la que no lo hace, es que no está lo suficientemente interesado. Sincerémonos de una vez por todas. Él no es tímido. Tú no lo intimidas.
“Si un hombre está interesado, ninguna distancia será lo suficientemente grande para apartarlo de tu camino. Pero si no está interesado, aunque seas su vecina, le parecerá que estás muy lejos”.
El hombre siente un profundo deseo de ser el iniciador de las relaciones. Es parte de su naturaleza. Ama el desafío.
Al hombre le encanta la persecución. Créeme. Cuando ve lo que quiere, no para hasta conseguirlo. Si el hombre que adoras no te está cortejando, es que no está interesado en ti.
Los hombres pueden dar excusas interminables acerca de por qué no ponen empeño en una relación. Son capaces de decirle cualquier cosa a una mujer, y muchas veces hasta de mentirle o dar rodeos para evitar que ella se sienta herida o que pueda darse cuenta de que simplemente no están interesados. Un hombre dirá que está ocupado, que está tapado de trabajo, que tiene otras cosas entre manos, y hasta puede llegar a no prestarle mucha atención a una mujer o a ignorarla.
Él es encantador, tiene una sonrisa fascinante y una risa que te derrite. Se adelanta a abrirte la puerta, e incluso te ha invitado a algunas citas. Pero,¿qué me dices de todos esos mensajes de texto confusos que te han despistado completamente? ¿Qué hay de todas esas veces que te dejó dudando si habías hecho algo malo como para disgustarlo o causarle una pérdida de interés por ti?
Para de perseguir a un chico que no te da ni la hora, o que no está haciendo ningún esfuerzo por comunicarse. Debes dejarlo en el segundo en que empieces a dudar que eres alguien especial para él.
No seas el tipo de chica que deja que un hombre juegue con su mente, con sus sentimientos o incluso con su cuerpo. Una mujer debe ser lo suficientemente segura de sí misma, debe conocer su valía y no perder tiempo esperando a un hombre que no desea ir tras ella, que no desea cortejarla.
La idea de dejar que un hombre te corteje puede sonar pasada de moda, pero considera esto: Un hombre te mostrará quién realmente es por la forma en que te corteja. La forma en que se comunica contigo, en que te enamora, en que trata de impresionarte.
Un hombre de verdad te cortejará todos los días. Un hombre de verdad te motivará para que seas lo mejor que puedas ser, y te admirará por tus defectos. No te dirá que acepta esos defectos para luego usarlos en tu contra cuando esté disgustado o frustrado contigo como un chico lo haría; un hombre de verdad te respetará, no importa lo que pase. Un hombre de verdad te apoyará en el logro de tus objetivos porque desea que triunfes, y desea que seas feliz. Un nombre de verdad no jugará con tus emociones como si fuesen un juguete, y no te llamará sólo cuando le resulte conveniente. La vida es complicada, pero si realmente le importas, se hará tiempo para ti, en vez de simplemente tratar de ver dónde encajas en su agenda.
Debes estar con un hombre que te demuestre que le importas, un hombre que no te deje dudando de todo o que te tenga confundida; debes estar con un hombre que te vea como “una prioridad”. Déjame decirte aquí y ahora que lo que tú te mereces no es estar “hablando” con alguien. Lo que te mereces no pasa por someterte a ser una “cosa” con alguien. NO. Mereces un amor tan puro que incluso la rosa más blanca no pueda compararse a la pureza de vuestros sentimientos mutuos. Mereces confiar en que eres más que una cosa con la que un hombre pueda pasar tiempo cuando le convenga.
Tú mereces ser cortejada por un hombre real.
A veces puede ser duro estar sola, pero querer a alguien que no está interesado o que no muestra interés por ti, puede ser aún más doloroso. Las cosas llevan su tiempo. Y en ese tiempo en que esperas al hombre correcto, ámate a ti misma tanto que sólo un hombre verdadero logre ser lo suficientemente valiente como para cortejarte.
Como mujer, es imperativo que te involucres en cada nueva situación con el corazón abierto y limpio como una hoja en blanco. Habiendo dicho esto, también es imperativo que no entregues tu corazón hasta que sepas que un hombre está real y genuinamente interesado en ti de la misma manera.