Durante mucho tiempo, esta chica creyó en todas tus promesas, mientras tú no hacías más que tomarla por tonta.
Seguía buscando excusas para que la maltrataras y seguía esperando que te convirtieras en el hombre que juraste ser.
Siguió justificándote y siguió esperando que cambiaras tu forma de ser. Siguió perdonándote por todo lo que le habías hecho pasar.
Puede que pensaras que era una tonta por creerte y por perdonarte siempre. Podrías considerarla una loca. Pero la verdad es que sólo estaba loca por ti.
Porque esta chica es cualquier cosa menos estúpida. Y por eso ha decidido que está harta. Por eso ha decidido poner fin a esta farsa y decir su último adiós.
La verdad es que ella todavía tiene un corazón de oro pero ya no hay espacio para ti en él.
La verdad es que esta chica se ha cansado de creer en tus mentiras. La verdad es que no puede seguir perdonándote y que ya no quiere dejarte jugar con ella.
No puede seguir perdonándote porque has violado su confianza más de una vez.
Porque cada vez que empezaba a creer que esta vez sería diferente y que por fin cambiarías, acababas haciendo algo aún peor que antes.
Esta chica no es alguien que te corte al primer golpe porque cree en la gente. Y ella creyó en ti, incluso cuando era lo último que te merecías.
Pero ella no quiere seguir perdonándote porque realmente has cruzado la línea. Porque está harta de darte infinitas segundas oportunidades.
Porque cada vez que te aceptó de nuevo y cada vez que decidió darle otra oportunidad a esta relación, la arruinaste. Has arruinado todas las oportunidades que te ha dado.
Nunca viste su perdón como una oportunidad para hacerlo mejor. En cambio, actuaste como si ella te diera permiso para seguir lastimándola, como si te diera luz verde para seguir rompiendo su corazón.
Ella no puede seguir perdonándote porque tú empezaste a darla por sentada hace tiempo.
Porque empezaste a asumir que no había nada que pudieras hacer para que ella dejara de amarte o para que se alejara de ti definitivamente, sin importar cuánto la lastimaras.
Porque siempre la trataste como si supieras que se quedaría a tu lado, a pesar de todo el dolor emocional que le estabas causando.
La verdad es que te has estado aprovechando de ella y de la forma en que te quiere.
Que utilizaste su gracia y su corazón perdonador como una oportunidad para tratarla como querías, sin pensar nunca en las consecuencias emocionales que tu comportamiento estaba dejando en ella.
Pero lo más importante es que ella no puede obligarse a seguir perdonándote, aunque quisiera, porque nunca sentiste pena por nada de lo que le hiciste pasar.
Sí, le dijiste que lo sentías cientos de veces. Pero ninguna de tus disculpas fue sincera.
Nunca intentaste ponerte en su lugar y ver las cosas desde su punto de vista.
Nunca te esforzaste por comprender realmente todo lo que le habías hecho a esta chica durante años.
Nunca te sentiste culpable de todo el daño emocional que le causaste.
Nunca te sentiste culpable de ninguna de sus lágrimas y nunca pensaste que eras responsable de sus desamores.
Tal vez no eras consciente de todo el dolor que le causaste. O simplemente intentaste justificarte sin mirar la verdad a los ojos.
O simplemente eres un gilipollas insensible al que no le importa lo que está haciendo a alguien que le quiere.
De cualquier manera, la verdad es que nunca has mostrado ningún signo de resentimiento real.
La verdad es que herirla no te persigue.
La verdad es que nunca le has demostrado que estabas honestamente arrepentido de todo lo malo que habías hecho.
¿Y qué sentido tiene perdonar constantemente a alguien que claramente no quiere ser perdonado?