Si alguien te pregunta “¿sientes que has sufrido Abandono Emocional?” tu respuesta inmediata sería un rotundo NO, pero si exploras un poco más profundo dentro de ti y reflexionas un poco al respecto, será imposible que no te des cuenta que en realidad eres una mujer que sufrió descuido emocional bien sea en el trabajo o en tu vida personal, incluyendo amigos, familia e incluso a tu pareja.
El abandono emocional aparece cuando alguien es incapaz de cubrir sus necesidades emocionales, es algo que puede sucederle a cualquiera y la mayoría de las veces la persona se da cuenta cuando ya es demasiado tarde. Es ese momento comienzas a sentir que algo no anda bien y te culpas por eso, es como si hubieses echado a perder las cosas aunque en realidad no hiciste nada. Una vez que te des cuenta que sufres abandono emocional será posible que lo enfrentes adecuadamente y puedas comenzar a recuperarte.
Estos son algunos signos comunes que indican que sufres de abandono emocional:
1. Te sientes aturdida
Más que una sensación física es el peso emocional de tus pensamientos, ves todo color gris y no sientes nada, poco te importan las cosas a tu alrededor, estás rodeada por tus seres queridos pero no sientes amor, es como si estuviesen distantes.
Esto no pasa con frecuencia pero cuando ocurre tus emociones simplemente desaparecen, esto es una clara evidencia de abandono emocional y la causa en la mayoría de los casos está escondida en algún lugar de tu pasado. Puede que se haya originado todo durante tu infancia porque tus padres no te prestaban suficiente atención o más tarde en tu vida producto de una relación tormentosa. Sin importar la causa aprendiste de manera inconsciente que suprimir tus emociones era una buena forma de evitar ser herida.
2. Prefieres estar sola
La verdad no te gusta pasar tiempo con otra gente porque casi nunca te entienden y son incapaces de comprender lo que estás pensando; además ya te has cansado de dar explicaciones y tratar de hacer que otros entiendan que lo que sientes está más allá de tu control. Simplemente tienes la sensación de que no encajas en ninguna parte e incluso puedes llegar a sentir que incómodas a los demás.
Cuando estás en algún evento social tiendes a irte temprano o a mantenerte en la periferia sin ninguna razón aparente. En estos casos te gustaría contar con alguien que te entienda pero no parece que los demás tengan mucho tiempo disponible como para detenerse a pensar en ti. Esto puede deberse por un desplante sufrido en el pasado por parte de cualquier persona en tu círculo social; quizás alguna vez escuchaste un susurro que decía “¿por que se sienta ella en nuestra mesa?” y a partir de allí todo comenzó.
3. Rechazas la ayuda de otros
No importa lo difícil de la situación por la que estés pasando, tu nunca pides ayuda. Cuando en la casa todos te ignoran y tienes que defenderte por ti misma o cuando tu pareja casi nunca está allí para apoyarte comienzas a acostumbrarte a hacerlo todo sola, y es por eso que ahora parece imposible para ti pedir o aceptar ayuda.4. Tienes baja autoestima
Cuando tus seres queridos no te valoran como deberían tienes la sensación constante de que no mereces su tiempo o que no eres importante para ellos. Esto casi siempre es falso pero aun así tú tienes esa incómoda sensación que es tan difícil quitarse.
Ese sentimiento te acecha en cada esquina y lo transfieres a todas las personas y las situaciones de tu vida, lo cual afecta negativamente tus relaciones interpersonales.
5. Siempre sientes que te falta algo
Esa sensación constante de que algo no esta completo tambien puede ser consecuencia de cierto grado de abandono emocional; es como si hubiese un vacío en tu interior donde falta el amor de ciertas personas. Esa persona puede ser cualquiera aunque la mayoría de las veces esto se debe a que no eres feliz en tu relación o a que tu pareja no te presta suficiente atención.
Es este caso particular sabes exactamente quien es el causante del problema porque sientes que solo esa persona puede llenar el vacío de tu corazón y devolverte la alegría. Por lo tanto lo mejor que puedes hacer es hablar con esa persona y explicarle lo que necesitas de ella. Si se niega, simplemente no te merece.
6. Te afecta mucho el rechazo y te ofendes fácilmente
Cuando has sufrido de abandono emocional el miedo se aloja en tu corazón y se queda allí instalado. Ese miedo constante al rechazo no aparece de la nada, por el contrario alguna vez en tu vida tuviste algún problema para encajar, quizás no estudiaste en la universidad que querías, te rechazaron en un trabajo o tu pareja te abandonó; sin importar las circunstancias lo que hubo fue un rechazo que ahora se manifiesta con una extrema sensibilidad y mucha facilidad para sentirte ofendida por lo que otros dicen de ti. Incluso te molestan las criticas constructivas ya que debido a tus experiencias previas las ves como un ataque.
Nunca piensas sobre las consecuencias del abandono emocional hasta que entiendes sus repercusiones, sin embargo es posible que puedas aprender a lidiar con eso e incluso llegar a sanar por completo y tener una vida normal. Para eso lo primero que tienes que hacer es evitar sentirte culpable por la actitud que toman hacia ti las personas a tu alrededor y, si es necesario, alejarte de la gente con la que no te sientes cómoda.