A lo largo de nuestra vida nos enfrentamos a diferentes retos y cosas. Estas cosas, tanto buenas como malas, juegan un papel muy importante en la formación de nuestro futuro y comportamiento.
Estas cosas pueden ser una razón temporal para ciertas emociones y acciones, pero no pueden ser una excusa para quedarse atrapado en una mentalidad autodestructiva para siempre. Pueden influir en nuestra forma de pensar y de comportarnos, pero no pueden poner nuestra vida patas arriba.
Bueno, sí pueden. Pero es nuestra responsabilidad asegurarnos de que no lo hagan. Es nuestra responsabilidad asegurarnos de recuperar el poder que tenemos sobre esas cosas y seguir llevando una vida feliz y plena.
Asumir la responsabilidad es el único camino que podemos tomar para superar las cosas que nos agobian. Así que, si te preguntas si el trauma de tu pareja puede tomarse como una excusa válida para su comportamiento, la respuesta es NO.
Verá, es responsabilidad de su pareja asegurarse de que su trauma no afecte negativamente a su relación. Si te dice cosas como “Yo soy así” o “Tú sabes por lo que he pasado”, quizá debas replantearte tu decisión de estar con él.
1. Controlando
Créame, hay muchas formas en las que su pareja podría mostrar un comportamiento controlador. Puede exigirte que le llames cada vez que salgas de casa, o incluso pedirle permiso.
Puede que se enfade cuando haces planes sin él o que te haga sentir culpable por pasar tiempo con tus amigos y tu familia.
O incluso puede llegar a revisar tu teléfono con la esperanza de encontrar pruebas de que has hecho algo malo. Cuando finalmente te enfrentas a él, puede que incluso intente hacerte sentir mal.
Puede restarle importancia diciendo algo parecido a “no pude evitarlo, ya sabes por lo que he pasado”, o “sólo quería saber que estabas a salvo, estaba preocupado por mi…”.
Buscar excusas para su comportamiento en su trauma es una bandera roja importante. Usted no quiere tolerar el abuso y el mal comportamiento de alguien sólo porque ha experimentado algo negativo en el pasado.
Esto nunca se detendrá a menos que él asuma la responsabilidad.
2. Luz de gas
¿Alguna vez su pareja le ha dicho algo como “Te estás imaginando cosas, yo nunca dije eso”? O tal vez “¿No puedes aceptar una broma? Relájate un poco”. O incluso mi favorito personal: “¿Por qué estás tan enfadado, no fue tan malo?”
Si la respuesta es sí… Puede que tu pareja esté utilizando su trauma como excusa para darte luz de gas y manipularte para que pienses que sólo estás siendo paranoica. Lo que le haya pasado en el pasado no le da un pase para actuar como si siempre tuviera la razón.
No le da la razón para actuar como si tus preocupaciones fueran irrelevantes y locas, como si fueras demasiado sensible y emocional, como si fuera completamente normal que te hiciera cuestionar tu cordura.
Créeme, no te está haciendo luz de gas porque su trauma le haya hecho estar deprimido, irritable y necesitado. Te está haciendo luz de gas porque es un imbécil manipulador que no es capaz de asumir la responsabilidad de sus actos.
3. Engañando
No hay nada de malo en tener ciertos problemas de comunicación en tu relación. Algunas personas no son buenas para expresar sus emociones y necesitan un momento para averiguar lo que quieren decir (y cómo quieren decirlo).
Pero, si tu pareja te ignora deliberadamente, se desentiende de ti o te da el tratamiento de silencio cada vez que tenéis una discusión… No lo está haciendo por su trauma. Lo hace como una forma de castigo tóxico en la relación.
¿Se niega a responder a tus preguntas cuando estáis en medio de una discusión? ¿Se aleja cuando no sabe qué decir? ¿O deja de hablarte durante unos días, esperando a que tú des el primer paso?
Créeme, su trato silencioso no tiene nada que ver con su trauma pasado. Incluso si lo tiene, incluso si está conectado de alguna manera con lo que sea que haya experimentado en el pasado, todavía no es una excusa.
4. Abuso verbal
Hay una gran diferencia entre una discusión y el abuso verbal. Y no deberías lanzarte a poner etiquetas a tu pareja a menos que estés 100% segura de que sabes de qué estás hablando.
A diferencia de una discusión normal, el abuso verbal sale a relucir todos los días. Puedes reconocerlo por los frecuentes insultos, la humillación, la luz de gas, la condescendencia y la degradación.
“¿Por qué siempre haces eso? Eres un idiota”.
“¿En serio te vas a comer eso? Ese vestido ya no te queda bien”.
O qué tal “¡Es tu culpa, me hiciste enojar!”
Su trauma no es una excusa para su comportamiento. Claro que su trauma puede haber influido en su comportamiento, pero eso no significa que esté completamente bien que te trate así. No hay nada que le impida hablar con un terapeuta y obtener la ayuda que necesita.
Quizá debas considerar apartarte de la relación si ese comportamiento continúa.
5. Abuso físico
Por último, pero no menos importante, tu pareja podría manipularte para que pienses que su trauma es una excusa válida para ser físicamente abusivo. Lo creas o no, muchas víctimas de abuso físico ni siquiera se dan cuenta de que están en una relación abusiva, y aquí está la razón.
Es increíblemente difícil entender la situación cuando tu pareja te hace creer que estás siendo paranoica.
Comentarios como “No te he pegado, apenas te he tocado” y “Estás exagerando, ni siquiera te he empujado tan fuerte”. No hay excusa para el abuso físico.
Si te empuja, te sujeta contra la pared, te golpea ligeramente en la cabeza, te arrastra por el suelo o te hace daño literalmente de cualquier otra forma, está abusando físicamente de ti.
No hay zona gris. No hay nada que pueda decir que explique y justifique su comportamiento. Su trauma no es una excusa.
Si recurre a la violencia o te hace daño de alguna manera, tienes que acudir a un profesional o a alguien de confianza para que te ayude a salir de la situación y a terminar la relación.