No debes contentarte con alguien que te obliga a esperar un mensaje, a esperar la oportunidad de verlo, a esperar a que se ponga una etiqueta en tu relación.
Debes aguantar hasta que conozcas a alguien que esté ansioso por llamar a su novia, ansioso por presentarla a sus padres, ansioso por comenzar su vida con ella.
Si se comportó como si fuera tu novio pero no hizo nada para convertirse oficialmente en tu novio, te está haciendo perder el tiempo. Te lleva en un barco porque le gusta tenerte con él cuando está aburrido o cuando está solo, pero no quiere tenerte con él todo el tiempo.
Si duda en elegirte, debes elegirte a ti mismo.
Si le pide que espere un mensaje, elija apagar el teléfono. Elige dedicar tu tiempo a algo que valga más la pena que esperar una respuesta que debería haber llegado horas antes. Elige concentrarte en ti mismo en vez de en él, porque si él no te considera una prioridad, tú tampoco deberías considerarlo una prioridad.
En lugar de lanzar tu fin de semana con la esperanza de que te invite a venir (segunda opción), elige hacer proyectos con tus amigos. Elige rechazarlo cuando te mande un mensaje a las 10 p.m., cuando debería haberse puesto en contacto contigo mucho antes. Debería haberte invitado a salir antes de que realmente quisiera verte.
Si duda en elegirte, debes elegirte a ti mismo. Debes reconocer que mereces más. Tienes que seguir adelante porque él ni siquiera se da cuenta de lo que está pasando después.
Perseguirlo para persuadirlo de que te trate mejor no tiene sentido. Él no cambiará. Seguirá lastimándote, mientras tú se lo permitas.
En lugar de darle una segunda oportunidad de que no ganó, en lugar de convencerlo de que en el fondo, es un buen tipo y merece otro intento, piense en lo que se merece… Te mereces a alguien que dé tanto como él recibe. Alguien que se pone en contacto con usted a mediodía y no por la noche, cuando está medio borracho.
Usted se merece a alguien que esté dispuesto a asociarse con usted y no a alguien que no esté seguro de estar preparado para tal compromiso. No alguien que se pregunte si vales o no la molestia de que está renunciando a su vida de soltero. No alguien que da más valor a su “libertad” que a su buen corazón.
No lo elijas cuando sólo duda en elegirte a ti. No se involucre en una relación unidireccional. No inflija este tipo de dolor cuando pueda evitarse fácilmente.
En lugar de elegir escuchar a tu corazón, elige escuchar a tu razón. Su sentido común Esta voz en la parte posterior de su cabeza que le recuerda que usted es mucho mejor que eso.