Nunca estaré satisfecho con la mediocridad cuando se trata de amor.
Nunca me conformaré con palabras dulces sin acciones que las prueben.
Nunca me conformaré con unos pocos momentos de pasión entre cientos de momentos de indiferencia.
Nunca estaré satisfecho con ser amado por un día y ser descuidado por una semana.
Nunca estaré satisfecho con un esfuerzo inconsistente o una comunicación mundana.
Nunca estaré satisfecho con un amor que no inspire a ser más amoroso y más generoso.
Nunca estaré satisfecho con el amor mediocre
No quiero a alguien que ya no esté entusiasmado con el amor por la cantidad de veces que se ha roto o porque lo ha hecho todo antes. Quiero a alguien que todavía tenga esperanza, alguien que todavía esté entusiasmado con las pequeñas cosas, alguien que todavía se ría de la idea de que estemos juntos.
Quiero a alguien que entienda que el amor verdadero cura, no lastima. Que el amor no es un juego de números y que preocuparse demasiado no es una invitación a dar por sentado el corazón de alguien.
No quiero a alguien que utilice a las personas como rebotes o que trate el amor como un juego de cuántos corazones más pueden romper. No quiero a alguien que tome los sentimientos a la ligera o que quiera un amor superficial y superficial. No quiero a alguien que piense que las emociones son dramáticas o que quiera más es la necesidad.
No quiero a alguien que no entienda el compromiso. No quiero a alguien egoísta con el corazón.
Nunca estaré satisfecho con un corazón que no sea todo mío.
Nunca estaré satisfecho con alguien que no haya invertido.
Nunca estaré satisfecha con alguien que no esté dentro.
Porque créeme, he intentado estar con este tipo de gente, pero al final del día, me sentí vacía. Mi corazón no me dejaba aceptar los pedazos. Mi corazón no estaba contento con el pan rallado. Mi corazón ha esperado lo suficiente por el verdadero negocio y no aceptará nada menos que eso.
Nunca estaré satisfecho con lo temporal.
con la que nunca estaré satisfecho a veces.
Nunca estaré satisfecho con tal vez.
Mi corazón ha sido un tonto muchas veces, pero hay una cosa que hace bien cada vez. Siempre se apaga y me advierte cuando es hora de irme si no me quieren adecuadamente. Siempre