Eres una mujer atractiva. Eres hermosa, inteligente, astuta y con un gran sentido del humor.
Desde que tienes memoria, los hombres te han estado persiguiendo. Siempre has llamado la atención del sexo opuesto.
Donde sea que aparezcas, los hombres coquetean contigo.
Te lanzan piropos en persona, te dicen frases para conquistarte, te contactan por redes sociales y, claramente, quieren intentar algo contigo.
Sin embargo, a pesar de todo eso, no tienes suerte en el amor.
Está claro que eres una mujer deseable, pero no puedes recordar cuándo fue la última vez que tuviste una relación real y comprometida con un hombre que te amara de verdad.
Bueno, el problema puede estar en que no conoces la diferencia entre un chico que te quiere y un hombre que está dispuesto a invertir en ti.
A donde sea que mires, hay muchos chicos que te desean.
Hombres que te escriben mensajes, que te dan cumplidos y que actúan como si quisieran algo serio contigo.
Sin embargo, cada uno de ellos se echa para atrás en cuanto las cosas se ponen reales.
De repente desaparecen de tu vida, cambian su comportamiento sin previo aviso o recuerdan que “no están listos” para involucrarse emocionalmente justo cuando la relación empieza a avanzar.
¿Te suena familiar? Si es así, está bastante claro que ninguno de esos chicos estuvo nunca realmente comprometido contigo.
No estaban dispuestos a esforzarse por la relación.
Nunca tuvieron la intención de hacer sacrificios por ti y jamás te valoraron realmente.
En cambio, solo tenían un objetivo.
Quizás querían llevarte a la cama, tal vez buscaban que te enamoraras de ellos, necesitaban alimentar su ego frágil, querían que los vieran en público con una mujer como tú, o intentaban aprovecharse de ti de alguna otra forma.
Una vez conseguían lo que querían, desaparecían. De cualquier manera, el punto es que todos esos tipos hicieron una inversión mínima.
Por otro lado, cuando conoces a un hombre de verdad, que quiere tener una relación madura y comprometida contigo, las cosas son completamente diferentes.
Este hombre realmente se preocupará por ti y no saldrá corriendo ante la primera incomodidad.
No te tendrá esperando durante semanas o meses mientras “se decide”.
En cambio, un hombre así sabrá lo que quiere desde el principio.
No tendrás que esperar a que le ponga nombre a lo que hay entre ustedes. No actuará como si necesitara tiempo para darte el lugar que mereces en su vida.
Un hombre que quiere invertir en ti lo hará desde el primer momento.
No fingirá ser emocionalmente inaccesible.
Jamás te hará cuestionar sus intenciones. No te enviará señales confusas ni jugará al juego del “ahora sí, ahora no”.
Este hombre te buscará, en lugar de esperar que seas tú quien lo persiga.
No se hará el difícil, ni te hará competir con otras mujeres a su alrededor.
No te pondrá en la situación de analizar cada una de sus acciones.
Será constante y nunca te hará dudar de lo que siente.
No aparecerá y desaparecerá de tu vida como si nada.
Con él, siempre sabrás dónde estás parada.
Será honesto sobre sus sentimientos y no intentará manipularte ni hacerte creer que es alguien que no es.
Y lo más importante: este hombre no te hará perder el tiempo. No absorberá tu energía solo para echarse atrás en el momento en que empieces a sentir algo real.
Él verá tu valor desde el primer día y jamás permitirá que aceptes menos de lo que mereces.
Este hombre te hará sentir amada, deseada, respetada y valorada.
Sé que probablemente piensas que ya no existen hombres así. Que solo puedes soñar con encontrar a alguien así.
Sin embargo, te aseguro que él está ahí afuera. Solo necesitas tener la paciencia suficiente para dejar que se cruce en tu camino.
Así que por favor, espera por él. Deja de darles oportunidades infinitas a esos inmaduros que solo están jugando con tu mente.
Tienes que alejarte de quienes no te merecen.
Porque, seamos sinceras: no puedes reconocer a un hombre de verdad si estás demasiado ocupada lidiando con idiotas.