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Dejarlo ir es difícil, pero a veces es lo mejor que puedes hacer por ti

Dejarlo ir es difícil, pero a veces es lo mejor que puedes hacer por ti

Todo lo bueno llega a su fin tal vez suene a cliché, pero es cierto y a veces puede ser muy doloroso. Esto es especialmente así cuando es su relación la que ha llegado a su fin.

Te enamoraste profundamente de él. Lo dejas entrar en tu corazón y le dedicas cada una de tus partes. Él fue la razón de todas tus sonrisas y momentos de felicidad. Él fue el que hizo latir tu corazón como loco. Pasaron un buen rato juntos, pero también pasaron por muchos problemas y pruebas. Luchaste duro para preservar tu relación, pero de alguna manera las cosas se salieron de control.

Muchas veces, oíste esa vocecita en tu cabeza que te decía: “Tienes que dejarlo ir.” Sonaba horrible. Insoportable. No podías soportar escucharla, así que trataste de mantenerla en secreto.

Nunca pensaste que tendrías que despedirte de él. Creísteis que estabais destinados a estar juntos. Creías que era tu alma gemela.

No podías aceptar la realidad de que muchas cosas cambiaron en tu relación. No podías aceptar el hecho de que el amor que una vez sentisteis el uno por el otro se desvaneció.

Y no intenten pensar en las razones por las que las cosas terminaron entre ustedes de la forma en que lo hicieron. Tal vez tus personajes ya no coinciden. Tal vez la química y la conexión se desvanecieron con el tiempo. Tal vez empezaste a tener demasiados problemas y peleas. Tal vez te enteraste de que te dirigías en direcciones diferentes. O tal vez se dieron cuenta de que no eran el uno para el otro y que el universo tenía planes diferentes para ustedes.

Pero, así es como funcionan las cosas. La vida no es perfecta. El amor no es perfecto también. Se supone que las relaciones te hacen sentir feliz y emocionalmente realizado. Sin embargo, si sólo te preocupan y te hacen sentir triste y pesado, significa que es hora de que te dejes llevar.

Es hora de que dejes ir a la persona que ya no saca lo mejor de ti. La persona que ya no te presta atención. La persona cuyos sentimientos por ti se han enfriado hace mucho tiempo.

Sé que es doloroso dejar ir a la persona que una vez fue todo para ti. La persona que amaste incondicionalmente. Pero a veces eso es lo mejor que puedes hacer por ti mismo.

Y no! No estoy tratando de decir que deberías rendirte sin luchar. Usted deja ir a alguien sólo después de haber agotado todos sus medios para salvar su relación. Sólo después de dar lo mejor de ti para que las cosas funcionen.

Después de todo, es inútil luchar por alguien que no se molesta en perderte. Alguien que se rindió contigo hace mucho tiempo. Alguien que se ha rendido sin luchar.

No tiene sentido permanecer en una relación que te agota emocional y físicamente. Una relación que te hace sentir débil, confundido, vacío y perdido.

No puedes esperar convertir a alguien en la persona que crees que quieres que sea. No puedes cambiar a alguien que no quiere ser cambiado. No puedes hacer que alguien te ame. El amor nunca es forzado.

Te debes a ti mismo aceptar la verdad. La verdad de que él no es el indicado para ti y que no puedes permitirte aferrarte a algo que ya no existe. No puedes esperar que algún milagro suceda y salve tu relación.

Necesitas saber cuándo es el momento de marcharte.

Necesitas saber que dejar ir a alguien no es un fracaso. Es una pérdida y es doloroso, pero no es un fracaso. De hecho, es una de las mejores lecciones que la vida te puede enseñar.

Te enseña que el amor no siempre se ve y se siente como pensabas que se vería. Te enseña que a veces el amor no dura para siempre. Esa alma gemela no se deja caer a un lado de tu puerta. Se encuentran después de que usted enfrenta muchos desafíos, altibajos y luchas en sus relaciones.

Te enseña que el verdadero amor puede golpearte cuando menos te lo esperas.

Y es por eso que separarse es a veces lo más razonable. Perderás a una persona, pero esto te abrirá otros caminos. Caminos que te llevarán hacia tu felicidad, hacia tu paz.

Caminos que te llevarán al hombre que se dará cuenta de tu belleza exterior e interior y que valdrá la pena el momento en que te vea. El hombre que estará más que dispuesto a hacer el esfuerzo contigo. El hombre que sabrá cómo amarte, respetarte y valorarte mejor porque te mereces nada menos que eso. El hombre que sabrá que vales todos los esfuerzos.