Sinceramente, no hay ningún hechizo mágico que pueda arreglar tu relación: tienes que hacerlo tú solo. Si sientes que algo no va bien, tienes que trabajar para arreglarlo, sin excusas.
Tu pareja tiene que estar en ello contigo, de lo contrario, no tiene sentido luchar por algo cuando la otra persona no quiere.
Sé que las relaciones duraderas pueden volverse un poco aburridas con el tiempo, pero es tu responsabilidad mantener viva la llama.
Como estás leyendo esto, sé que eres muy consciente de ello. Así que, ¿cómo puedes volver a encarrilar tu relación cuando está hambrienta de amor?
1. Hablar y ser compañeros de verdad
Puede que algunos pongáis los ojos en blanco y digáis que ya sabéis lo importante que es la comunicación. Pero, ¿sabéis realmente lo crucial que puede llegar a ser? Por eso lo he puesto en primer lugar.
Tienes que hablar con calma de todo lo que te molesta. Reparad lo roto después de la discusión y no guardéis rencor.
Sed compañeros, pero de verdad. No le dejes que resuelva “sus” problemas él solo, sino pregúntale en qué puedes ayudarle y, por supuesto, que él también esté ahí para ti.
Pregúntate qué puedes darle y estate a la altura de todas sus necesidades. Haz que se sienta seguro y protegido, y viceversa también.
Por ejemplo, si notas que tu pareja se siente un poco indispuesta, pregúntale si hay algo que puedas hacer para que se sienta mejor.
Tal vez sólo necesite un abrazo o una siesta, así no le presionarás para que hable cuando está claro que sólo está cansado.
2. Planea un “tiempo a solas”
¿Qué se te pasó primero por la cabeza: tener tiempo para ti o planear una escapada de fin de semana para los dos? Sea lo que sea, haz exactamente eso.
A veces las parejas pasan demasiado tiempo juntas y necesitan alejarse y pasar algún tiempo a solas para apreciar de verdad a la persona que tienen a su lado.
Otras, simplemente necesitan evadirse de la realidad durante algún tiempo y disfrutar de la compañía del otro.
Tener una cita, hacer el tonto, disfrazarse, ir a bailar o simplemente acurrucarse en una habitación de hotel en su ciudad natal.
También puede ser útil dedicarse juntos a un nuevo hobby, como cocinar o pintar. Haced lo que creáis que encenderá de nuevo esa llama.
3. Demuéstrense afecto durante dos minutos, tres veces al día
Vale, no estoy diciendo que empieces a contar exactamente dos minutos y que sólo debas mostrarte afecto tres veces al día.
Establécelo como mínimo, pero asegúrate de que en esos momentos no exista nadie más que vosotros dos.
Quizá te beses y abraces por la mañana antes de ir a trabajar y le desees a tu pareja un día productivo o le saludes con una sonrisa en la cara cuando vuelva por la tarde.
No hay excusas para hacer esto, así que no intentes buscarlas.
Siempre puedes abrazarle un rato después de haber tenido un mal día en el trabajo.
Puede arroparte, darte un beso en la frente y conseguirte chocolate durante “esos días” en los que los calambres no parecen desaparecer.
4. Escucharse de verdad
Por lo general, cuando hablamos con alguien, ya sea nuestra pareja, un amigo o un compañero de trabajo, tendemos a observarlo detenidamente para comprobar si hay señales no verbales.
Luego sacamos nuestras propias conclusiones, que a veces pueden ser erróneas. Así que algo tiene que cambiar si de verdad quieres escuchar a tu pareja.
Hay un ejercicio sencillo para hacerlo. Sentaos uno al lado del otro y daos la espalda. Podéis inclinaros hacia atrás, así conseguiréis ese contacto físico y esa cercanía que os hará sentir seguros.
Si esto no es algo que vayáis a hacer, podéis poneros vendas en los ojos y sentaros uno frente al otro.
Tomaos de las manos, acariciadlas suavemente y escuchad lo que tiene que decir.
Tu mente estará completamente concentrada en las palabras de tu pareja y él se sentirá seguro de ser vulnerable, ya que sabe que sigues ahí, abrazándole.
5. Sé agradecida y expresa tu aprecio
A veces, la vida es tan ajetreada que nos olvidamos por completo de todas esas pequeñas cosas por las que estamos agradecidos.
Por eso, tómate un tiempo para reflexionar sobre todo lo que está pasando y aprecia de verdad todo lo que tu pareja hace por ti.
Si estás constantemente insistiendo en las cosas en las que no es bueno, eso no va a ayudarle a mejorar.
Más bien, dale las gracias por hacerte café por la mañana cuando te has levantado un poco tarde y querías ir corriendo al trabajo sin tu combustible.
Probablemente, se asegurará de que lo tengas todas las mañanas después de eso.
6. Escribe todas las razones por las que elegiste a esa persona
Por último, pero no por ello menos importante, si tu relación está hambrienta de amor y quieres reconducirla, prueba a escribir todas las razones por las que le elegiste.
Puede que te lo guardes para ti, pero te sugiero que lo compartas con tu pareja.
Es incluso mejor si lo hacéis juntos y leéis en voz alta esas palabras después de una cena romántica a la luz de las velas. Escribe todas las cosas que han mejorado tu vida desde que le conociste.
Empieza con cosas pequeñas como “esta mañana me ha traído el desayuno a la cama” y sigue con las grandes como “me ha enseñado lo que es el amor incondicional” o “me empuja a alcanzar mis metas”.
Esas razones simplemente os recordarán lo afortunados que sois los dos por tener a alguien que os comprende y os aprecia en este mundo de locos.
Te darás cuenta de que has encontrado tu diamante y no dejarás que se te escape de las manos.
Todas estas cosas que he mencionado cambiarán definitivamente la dirección en la que se dirigía vuestra relación amorosa y seguramente os sentiréis emocionados por todo lo que se os viene encima.
Espero que estéis preparados para innumerables aventuras, un montón de besos y largos abrazos que aún estáis por compartir.