Nombra a una persona que no esté nerviosa antes de su primera cita. No puedes, ¿verdad? Bueno, eso es porque todos nos enfrentamos a los mismos problemas, nos guste admitirlo o no.
No es tan fácil presentarse delante de la persona que realmente te gusta y arriesgarte a que no le correspondas.
Como todo el proceso previo a la primera cita puede llegar a ser realmente estresante, he decidido escribir un par de consejos que pueden ayudarte a sentirte más seguro a la hora de ocupar un espacio en las citas. Pero, sinceramente, una frase lo resume todo: Relájate, todos somos humanos.
Sin embargo, aquí tienes esos consejos. Y recuerda, ¡diviértete!
1. Prepárate la cita de antemano
La práctica hace al maestro, así que ¿por qué no ibas a preparar la cita de antemano? No digo que tengas que simularlo todo, pero puedes tomarte un tiempo y pensar en las posibles preguntas que le harás a tu cita.
Quizá un ejercicio para aumentar la confianza en ti misma también pueda ayudarte, así que prueba a ponerte delante del espejo y comprobar cómo te ves cuando hablas de ti, por ejemplo.
También puedes enviarle un mensaje de texto para romper el hielo y que toda la cita sea un poco más informal.
Además, intenta descubrir cosas nuevas sobre aficiones, series o películas que le gusten, para que no se os acaben los temas de los que hablar.
Cuando hables de las cosas con las que estás familiarizado, sonarás más seguro de ti mismo que cuando intentas forzar una conversación sobre algo de lo que no tienes ni idea.
2. Ponte algo que te haga sentir seguro (pero asegúrate de que es cómodo)
La gente dice que sólo tenemos una oportunidad para causar una primera impresión, y es cierto (en mi opinión).
Pero no te pongas tacones altos y un vestido ajustado si no te sientes cómoda con esa ropa sólo porque crees que a tu cita le puede gustar.
Asegúrate de llevar ropa que te dé confianza, pero que al mismo tiempo sea cómoda.
Es decir, no te gustaría quitarte los zapatos debajo de la mesa en un restaurante elegante porque te aprieta mucho el dedo meñique del pie, ¿verdad?
La forma en que te comportas dice mucho de si tienes confianza en ti mismo o no, así que asegúrate de comprobar también los aspectos básicos del lenguaje corporal antes de la cita.
Mantente erguido, sonríe mucho y, de vez en cuando, tócale la mano mientras te ríes de su chiste. Ah, y retuércete un poco el pelo. Siempre funciona de maravilla.
3. No te compares con los demás
Hagas lo que hagas, no te compares con los demás. Todos somos únicos a nuestra manera y tú eres perfecta tal y como eres.
No importa si esa chica tiene el pelo más largo o la cintura más estrecha que tú. Ha elegido cenar contigo, no con ella, así que tiene que significar algo, ¿no?
Olvídate de tu crítico interior, ¡mándala de vacaciones o algo! Mantén esa actitud positiva y disfruta de cada segundo que pases con él.
Tienes que estar a gusto en tu propia piel y aceptar todos tus vicios y virtudes por completo.
Sólo así parecerás una mujer segura de sí misma, y ése es el punto más débil de los hombres. No pueden resistirse a la confianza y a esa chispa en tus ojos cuando hablas de cosas que te gustan.
Así que, por favor, deja de compararte con los demás y brilla con luz propia.
4. Conoce tus miedos
Otra cosa realmente importante es que conozcas tus miedos. ¿Qué quiero decir con esto? Bueno, ¿tienes miedo de parecer aburrida, o de que él no vaya a disfrutar mientras hablas de tu experiencia de voluntariado en el extranjero?
¿Tal vez te preocupa que se te estropee el vestuario o que seas demasiado torpe y se te caiga la bebida? Antes de la cita, piensa en todas las situaciones posibles y trata de encontrar una solución.
Eso te ayudará a controlar tus niveles de ansiedad y a disfrutar por completo de esa primera cita. Resultarás ser la chica preparada para todo en lugar de alguien nerviosa, ¿verdad?
5. No te tomes las cosas a pecho
También es hora de hablar de esto. Pase lo que pase, no te lo tomes como algo personal. Es posible que no le gustes, o que no le gustes tanto como él a ti.
Pero eso no es culpa tuya. Simplemente tenemos gustos diferentes y lo que a un hombre no le parece atractivo, a otro seguro que sí.
Es decir, si a dos personas no les gusta el mismo vestido, nadie va a echarle la culpa al vestido, ¿verdad? Sería aburrido si todos fuéramos iguales, la diversidad es divertida.
Si eres “demasiado” para ese chico, es que no es el adecuado. Y quién sabe, ¿quizá conozcas a tu príncipe azul de camino a casa después de esa cita fallida?
6. Sé la mejor versión de ti misma
Decir que tienes que ser tú y llegar tal y como eres ya es un poco tópico. Digamos más bien que tienes que ser la mejor versión de ti mismo.
Por supuesto, no se lo reveles todo a tu cita de inmediato. Ser misterioso genera expectación para la siguiente cita y eso es importante.
Sin embargo, ser grosera, no demostrar que tienes modales y llegar tarde a la primera cita no es nada recomendable.
Ya tendrá tiempo de darse cuenta de por qué tienes una camiseta que dice “nunca a tiempo”, pero por ahora, intenta mostrar tu mejor cara.
Así que no seas sólo tú, mejor sé la mejor versión de ti mismo. Y si a la otra persona no le gustas por lo que eres, pues pasa página. Al final darás con alguien que te apreciará por completo.