¿Está usted recientemente soltera (y dispuesta a mezclarse)? ¿Fuiste tú la que lo dejó, o fue al revés? Si la relación era tóxica, deberías alegrarte de que se haya acabado. ¿Por qué digo esto?
Las relaciones requieren mucho trabajo, pero a veces no hay nada que puedas hacer para salvarlas. O bien intentasteis todo como pareja para que funcionara, o fuisteis los únicos que lo intentasteis. En cualquier caso, no había forma de mantenerla.
Si eres como yo, puede que le des demasiadas vueltas a la situación. ¿Había algo más que pudieras hacer? ¿Y si pidieras una opinión más y visitaras a otro experto en relaciones? Quizá te quería a su extraña manera y simplemente no sabía cómo expresarlo.
No soy un terapeuta ni un experto en relaciones, y seguramente no soy alguien cercano a ti. Pero sí soy alguien que te va a recordar por qué deberías alegrarte de que se haya acabado. Todo pasa por una razón y te prometo que es mejor así.
Adelante, sigue leyendo estos recordatorios de por qué tu relación no era sana y por qué deberías agradecer la ruptura.
1. Nunca te llevó a citas
¿Has tenido alguna vez una cita oficial? Ya sabes de qué hablo: velas, restaurante elegante, comida deliciosa, vino… ¿No?
Ahí tienes, la primera razón por la que deberías alegrarte de que haya terminado. Eres una dama y mereces ser tratada como tal.
El chico que esté a tu lado debe ser un caballero, sacarte a pasear y hacerte sentir especial. Si tu ex nunca hizo ninguna de estas cosas, o si siempre tuviste que pagar la mitad (o todo) de la cuenta, es mejor que el imbécil esté fuera de tu vida.
2. Te enseñó con qué NO debes conformarte
¿Eras tú la “necesitada” de la relación simplemente porque establecías unas normas? ¿Le molestaba tu afecto y tenías que darle espacio constantemente? ¿Se quejaba siempre de la cantidad de dinero que gastabas?
Nunca debes conformarte con menos de lo que mereces. Si no sabe apreciarte y descuida tu valor, deberías alegrarte de que se haya acabado. Pero al menos puedes estar agradecida: porque te enseñó lo que no quieres en la vida, incluyendo el tipo de pareja que no necesitas.
3. Te hizo sentir insegura
Ya he mencionado que él descuidaba tu valía y esto te hacía sentir insegura. Después de un tiempo en la relación, tu autoestima empezó a sufrir un duro golpe, hasta el punto de cuestionar todo lo que hacías. ¿Te resulta familiar?
El chico adecuado debería hacerte sentir segura de ti misma y ayudarte a mejorar, no lo contrario. Deberías alimentar el amor propio y él debería ser quien te ayudara con eso. Si él quería controlar lo que comías, por ejemplo, está más claro que el agua que tomaste la decisión correcta.
4. Tenía que estar en todas partes
¿Cuántas veces tuviste que llamar a tus amigos para preguntarles si tu novio podía acompañarte? ¿No lo recuerdas? Desde que empezasteis a salir, nunca estuvisteis solos. Él cuestionaba constantemente tu círculo social y nunca te dejaba ir sola con tus amigos.
A veces hacía escenas tan celosas que no tenías más remedio que llevarle contigo. Incluso las salidas nocturnas de chicas: no te dejaba ir sola, porque algún chico podía acercarse a ti y empezar a coquetear contigo.
5. No pasaste suficiente tiempo con tus amigos
¿Cuántas veces has cancelado planes con tu pareja simplemente porque te ha dicho, en el último momento, que ya había planeado algo? Y ese algo normalmente resultaba ser salir con sus amigos, lo que no te gustaba tanto.
Siempre elegías seguir sus planes, solo porque querías la paz en tu relación y evitar el conflicto. ¿Se quejaban tus amigos de la frecuencia con la que les dejabas tirados? Supongo que ahora mismo estarás asintiendo. Ahí tienes, chica, la vida sin él es una bendición.
6. Estabas preocupada por el futuro
¿Te hacía sentir ansiosa por tu futuro? Descartó tus planes y sueños, convenciéndote de que estabas siendo poco realista. Sigues dudando de algunas de las metas que querías alcanzar antes de empezar esa relación tóxica.
Reconozcámoslo, tenías aprensión por el futuro, simplemente por él. Nunca te cuestionaste tus sueños y objetivos hasta que llegó él. Tenías la visión más clara posible, sin embargo, de alguna manera, todo se volvió borroso en el camino. ¿Estás preparada para admitir que fue su culpa y que deberías alegrarte de que se haya acabado?
7. Nunca te gustó su grupo de amigos
Cada vez que salías con su grupo de amigos, te sentías constantemente como una acompañante. Eso es algo a lo que él nunca prestaba atención, y cuando intentabas hacerle ver las cosas desde tu punto de vista, te decía que estabas exagerando.
En realidad, nunca te gustó su grupo de amigos, pero te esforzaste en cambiar tu opinión por el bien de tu novio. Sin embargo, desde que rompisteis, ya no tienes que pasar tiempo con ellos. Bueno, eso es un alivio, ¿no?
8. Nunca tuviste tiempo para ti
El tiempo para mí era algo con lo que solo soñabas; en realidad nunca tenías tiempo para ti. ¿Te das cuenta ahora de lo tóxica que era la relación? Quizá tu ex intentó convencerte de que eras incapaz de viajar sola o de que es patético sentarse sola en una cafetería.
Sean cuales sean sus razones, te permitiste creer que él sabía más. Aunque te encantaba pasar horas en la bañera o mirando escaparates, dejaste de hacerlo. ¿Por qué? Porque él lo decía. ¿Sigues creyendo que él te conoce? No, pequeña, tú sabes mejor que nadie lo que necesitas.
9. Su ausencia creó espacio para el amor de tu vida
El último recordatorio, y me atrevo a decir que el más importante, que tengo para ti, es que su ausencia creó espacio para el amor de tu vida. Después de lo que pasaste con él, has aprendido a reconocer cuando un chico no te está tratando bien. Has recuperado la confianza en ti misma y por fin estás preparada para volver a tener citas.
Sabes muy bien lo que vales y no vas a comprometerlo nunca más. Una relación sana es algo que anhelas ahora mismo y la persona adecuada está ahí fuera para ti. Te lo prometo.
Solo ten paciencia y haz brillar tu luz allá donde vayas. El amor de tu vida se fijará en ti y te abrazará por completo.