Introvertidos. Esas misteriosas especies de criaturas humanas que se sientan en el rincón de la habitación cuando la fiesta está en pleno apogeo porque parecen no poder socializar.
No es porque no puedan, sino porque no se molestan en hablar con la gente. Si alguna vez has conocido a un introvertido y has pasado algún tiempo de calidad con ellos, ¡sabrás lo asombrosos que son!
Son personas maravillosas que pueden darte todo el amor y aprecio que necesitas. Salir con un introvertido puede ser lo mejor que puede pasar en tu vida!
1. Son leales
En primer lugar, son leales. Los introvertidos eligen a las personas con las que interactúan con mucho cuidado. Si estás en su vida, debes saber que eres muy especial.
Tienden a evitar demasiado contacto con la gente en las fiestas, lo que significa menos interacción con el otro sexo y menos (o una oportunidad inexistente) de engañarte. Los introvertidos son aquellos que volverán a poner de moda la lealtad.
2. Son muy introspectivos
Un introvertido siempre sabe por qué se siente de cierta manera porque pasa una cantidad ridícula de tiempo pensando en sus sentimientos y observaciones. ¿Por qué es tan importante para ti?
Bueno, si está pensando tanto, lo más probable es que tú también estés en su mente. Probablemente todo el tiempo. Pensar en ti será un placer y él siempre sacará a relucir cosas que ama de ti porque ya lo ha pensado durante días.
3. Menos caos en las relaciones
Los introvertidos son muy frescos, tranquilos y tranquilos. Odian discutir, lo que significa que hay menos drama en las relaciones. ¿Por qué querrían pasar horas peleando o sin hablar si podrían estar viendo una película juntos?
Su pareja introvertida probablemente anhele sentarse con usted y hablar de todo de una manera educada. No te gritará ni te insultará. Esta es la magia de la introversión.
4. Son unos oyentes increíbles.
Para entender el mundo que les rodea, los introvertidos escuchan. Si amas a un introvertido, a lo largo de toda la relación él te escuchará atentamente, siempre queriendo saber más de ti.
A los introvertidos les encanta saber cosas y por eso también quiere saber todo sobre ti. Él tratará de entenderlo y le dará consejos si lo está buscando.
5. Les encantan las pequeñas cosas
Debido al hecho de que los introvertidos son tan observadores, se dan cuenta de todo, como si lo cubrieras mientras dormía o lo besaras en la frente mientras leía.
Pequeñas cosas como estas hacen que el corazón de un introvertido se derrita. No pasará por alto estas pequeñas actividades cotidianas, sino que estará agradecido por ellas.
6. Tendrás tu propio espacio
Los introvertidos son muy comprensivos y dan el espacio necesario a su pareja. Ellos también necesitan espacio y entienden si necesitas tiempo libre.
Tu pareja introvertida no te molestará con mensajes de texto y llamadas telefónicas, sino que esperará a que te sientas mejor para que puedas abrazarte de nuevo.
7. Dan buenos consejos
¿Tienes algún problema? Bueno, el introvertido con el que estás sentado no sólo te escuchará atentamente, sino que probablemente ha leído un libro sobre ese tema, ha leído un artículo o simplemente lo ha pensado a fondo, así que no te preocupes, ¡tiene el consejo que necesitas para resolver tus problemas!
8. Se cuidan a sí mismos
¿Has oído alguna vez que no puedes amar a alguien si no te amas a ti mismo? Bueno, los introvertidos son lo que necesitas cuando se trata de esto.
Ellos se aman a sí mismos y saben cómo cuidarse a sí mismos, por lo que también sabrán cómo cuidar de sus necesidades.
9. Odian las charlas triviales.
Si pudieran, evitarían conversaciones superficiales en general. Las charlas triviales no son lo suyo. Por eso son tan especiales!
Descubrirás muchas cosas nuevas y te sentirás un poco más inteligente cada vez que salgas con un introvertido, porque expandirán tu mente para ver nuevos horizontes.
10. No bromean por ahí.
Si estás saliendo con un introvertido, lo más probable es que nunca haya dicho “te quiero” sin quererlo. A los introvertidos simplemente no les gusta bromear sobre sus emociones y siempre sabrás lo que está pasando dentro de ellos.
Esto no significa que no tengan sentido del humor, ¡es exactamente lo contrario! Simplemente eligen no mostrar ese lado de ellos.